Según la Real Academia Española los pronombres personales átonos de tercera persona "le, la, lo" y sus plurales "les, las, los" tienen las siguientes funciones:
Singular |
lo |
la |
le (se) |
Plural |
los |
las |
les (se) |
Sin embargo, en Madrid y otras zonas del centro de España se usan estos pronombres de forma errada, generando así lo que se conoce como: "leísmo, laísmo, loísmo".
Leísmo: consiste en usar los pronombres átonos
"le, les" como objeto directo cuando lo correcto sería usar los pronombres
"lo, la, los, las".
Existen tres tipos de "leísmo":
1. Leísmo de persona masculino.
2. Leísmo de persona femenino.
3. Leísmo de cosas o animales.
También tenemos el
"leísmo de cortesía" que consiste en limitar el
"leísmo" al uso de
"le" como objeto directo con la formas de
"usted, señor, etc..." Ejemplo:
"Le atenderé en breve señor." en lugar de
"Lo atenderé en breve señor."
1.
Leísmo de persona masculino: consiste en usar los pronombres
"le, les" como objeto directo cuando se refieren a nombres masculinos. Actualmente la Real Academia Española admite el uso de
"le" como objeto directo para referirse a nombres masculinos, pero sugiere evitar el uso de
"les" en lugar de
"los".
Ejemplos:
A Pedro lo encontré en el teatro. (dar preferencia a esta forma)
A Pedro le encontré en el teatro. (leísmo)
2.
Leísmo de persona femenino: consiste en usar los pronombres
"le, les" como objeto directo cuando se refieren a nombres femeninos. La Real Academia Española recomienda evitar el uso de
"le, les" como objeto directo para referirse a nombres femeninos.
Ejemplos:
A Carla la encontré en el teatro. (correto)
A Carla le encontré en el teatro. (evitar)
3.
Leísmo de cosas o animales: consiste en usar los pronombres
"le, les" como objeto directo cuando se refieren a nombres de cosas o animales. La Real Academia Española recomienda evitar el uso de
"le, les" como objeto directo para referirse a nombres de cosas o animales.
Ejemplos:
Al perro lo vacunaron ayer. (correto)
Al perro le vacunaron ayer. (evitar)
Laísmo: consiste en usar los pronombres átonos
"la, las" como objeto indirecto para referirse a nombres femeninos cuando lo correcto sería usar los pronombres
"le, les". La Real Academia Española recomienda evitar el uso de
"la, las" como objeto indirecto para referirse a nombres femeninos.
Ejemplos:
A María le gusta ir a la playa. (correto)
A María la gusta ir a la playa. (evitar)
Loísmo: consiste en usar los pronombres átonos
"lo, los" como objeto indirecto para referirse a nombres masculinos cuando lo correto sería usar los pronombres
"le, les". La Real Academia Española recomienda evitar el uso de
"lo, los" como objeto indirecto para referirse a nombres masculinos.
Ejemplos:
A Juan le ofrecieron un nuevo trabajo. (correto)
A Juan lo ofrecieron un nuevo trabajo. (evitar)